Una temporada mas los Angelinos de Los Ángeles no pudieron repetir todas las cosas positivas que habían hecho durante la competición regular cuando llegó la decisiva del mes de octubre.
Las jugadas claves de la Serie de Campeonato de la Liga Americana siempre les salieron mal y eso les costó que después de perder 5-2 el sexto partido quedasen eliminados por los Yanquis de Nueva York, que les ganaron 4-2 al mejor de siete.
Comenzaron la serie sin poder atrapar un elevado fácil y tampoco pudieron controlar toques con lanzamientos sencillos a la primera base en el último partido.
Las dos acciones simbolizaron los motivos por los que los Angelinos quedaron eliminados y fuera de la Serie Mundial que ahora disputaran los Yanquis contra los Filis de Filadelfia.
Pueden estar entre los equipos excelentes con mayor consistencia en las mayores, y con elogios por hacer bien todas la cosas pequeñas durante toda la temporada regular, pero lamentablemente no sucedió lo mismo en la fase final.
Contra los Yanquis, a quienes han sabido controlar muy bien, fueron todo un cúmulo de errores. Los Angelinos malograron jugadas difíciles y fáciles en toda ante los Bombarderos del Bronx.
Los propios jugadores de los Angelinos después de haber concluido el sexto partido y quedar eliminados reconocieron que no hicieron bien las cosas.
"No jugamos al estilo de los Angelinos. Quizá jugamos uno o dos partidos como acostumbran los Angelinos", señaló Hunter. "Cada error que cometimos, ellos lo capitalizaron y nos anotaron".
Hasta el veterano bateador designado, el dominicano Vladimir Guerrero pareció un jugador de secundaria al ser sorprendido en la primera base con un elevado corto en el jardín derecho.
El consentimiento generalizado de los peloteros de los Angelinos es que ante un rival como los Yanquis, las equivocaciones en un partido son parte del juego, pero se pagan caro.
"Tuvimos que superar muchos obstáculos esta temporada, como fue la muerte de un compañero, muchas lesiones en jugadores claves, y tuvimos problemas", admitió Hunter.
Los Angelinos consiguieron reponerse del fallecimiento de Nick Adenhart, muerto en accidente de tráfico, y ganaron la División del Oeste en la Liga Americana por quinta ocasión en seis campañas, para luego barrer por 3-0 a los Medias Rojas de Boston en la serie de división.
Pero fueron superados 33-19 en la pizarra por los Yanquis y se quedaron a una carrera en dos derrotas y a dos en otra. Tuvieron un promedio de .236 al bate con tres cuadrangulares y 18 extrabases, incluidos cinco dobles del receptor Jeff Mathis, quien acumuló ocho en la temporada regular.
Hunter y el jardinero venezolano Bobby Abreu solamente remolcaron dos carreras cada uno. El también venezolano Juan Rivera se quedó con ganas de producir.
"Ellos tuvieron un buen juego de equipo", señaló Abreu, quien dejó a los Yanquis para firmar con los Angelinos. "Hay que reconocerles el mérito".
Por su parte, el manejador de los Angelinos, Mik Scioscia, reconoció que su equipo no siempre jugo bien y ahí estuvo la clave de la serie.
"Si hubiésemos hecho las cosas normales de la temporada regular, ahora no estaríamos eliminados, pero el deporte del béisbol cuando llega la competición de octubre es otro mundo muy diferente, en el que no hay margen para recuperarte de los errores", sentenció Scioscia.
Una temporada mas los Angelinos de Los Ángeles no pudieron repetir todas las cosas positivas que habían hecho durante la competición regular cuando llegó la decisiva del mes de octubre.
Las jugadas claves de la Serie de Campeonato de la Liga Americana siempre les salieron mal y eso les costó que después de perder 5-2 el sexto partido quedasen eliminados por los Yanquis de Nueva York, que les ganaron 4-2 al mejor de siete.
Comenzaron la serie sin poder atrapar un elevado fácil y tampoco pudieron controlar toques con lanzamientos sencillos a la primera base en el último partido.
Las dos acciones simbolizaron los motivos por los que los Angelinos quedaron eliminados y fuera de la Serie Mundial que ahora disputaran los Yanquis contra los Filis de Filadelfia.
Pueden estar entre los equipos excelentes con mayor consistencia en las mayores, y con elogios por hacer bien todas la cosas pequeñas durante toda la temporada regular, pero lamentablemente no sucedió lo mismo en la fase final.
Contra los Yanquis, a quienes han sabido controlar muy bien, fueron todo un cúmulo de errores. Los Angelinos malograron jugadas difíciles y fáciles en toda ante los Bombarderos del Bronx.
Los propios jugadores de los Angelinos después de haber concluido el sexto partido y quedar eliminados reconocieron que no hicieron bien las cosas.
"No jugamos al estilo de los Angelinos. Quizá jugamos uno o dos partidos como acostumbran los Angelinos", señaló Hunter. "Cada error que cometimos, ellos lo capitalizaron y nos anotaron".
Hasta el veterano bateador designado, el dominicano Vladimir Guerrero pareció un jugador de secundaria al ser sorprendido en la primera base con un elevado corto en el jardín derecho.
El consentimiento generalizado de los peloteros de los Angelinos es que ante un rival como los Yanquis, las equivocaciones en un partido son parte del juego, pero se pagan caro.
"Tuvimos que superar muchos obstáculos esta temporada, como fue la muerte de un compañero, muchas lesiones en jugadores claves, y tuvimos problemas", admitió Hunter.
Los Angelinos consiguieron reponerse del fallecimiento de Nick Adenhart, muerto en accidente de tráfico, y ganaron la División del Oeste en la Liga Americana por quinta ocasión en seis campañas, para luego barrer por 3-0 a los Medias Rojas de Boston en la serie de división.
Pero fueron superados 33-19 en la pizarra por los Yanquis y se quedaron a una carrera en dos derrotas y a dos en otra. Tuvieron un promedio de .236 al bate con tres cuadrangulares y 18 extrabases, incluidos cinco dobles del receptor Jeff Mathis, quien acumuló ocho en la temporada regular.
Hunter y el jardinero venezolano Bobby Abreu solamente remolcaron dos carreras cada uno. El también venezolano Juan Rivera se quedó con ganas de producir.
"Ellos tuvieron un buen juego de equipo", señaló Abreu, quien dejó a los Yanquis para firmar con los Angelinos. "Hay que reconocerles el mérito".
Por su parte, el manejador de los Angelinos, Mik Scioscia, reconoció que su equipo no siempre jugo bien y ahí estuvo la clave de la serie.
"Si hubiésemos hecho las cosas normales de la temporada regular, ahora no estaríamos eliminados, pero el deporte del béisbol cuando llega la competición de octubre es otro mundo muy diferente, en el que no hay margen para recuperarte de los errores", sentenció Scioscia.