El español tiene la victoria en el Tour de ciclismo casi al alcance después de imponerse hoy en Annecy en la segunda contrarreloj individual de la carrera, de 40,5 kilómetros
Contador cruzó la meta con los dientes apretados por el esfuerzo y sólo se permitió una sonrisa tras comprobar que, aunque sólo fuera por tres segundos, había logrado la victoria.
"Un triunfo en una contrarreloj del Tour es algo especial. Fue un gran día para mí", dijo el español de 26 años, que dio también una amarga lección a su rival en el Astana, Lance Armstrong.
Algo quedó claro al final: Contador, campeón en 2007, domina el Tour al estilo del derrotado texano en sus mejores tiempos: primero en las montañas y ahora por primera vez en la contrarreloj.
El español ganó con un tiempo de 40:30 minutos por delante del suizo Fabian Cancellara, actual campeón olímpico contra el crono. Tercero fue el ruso Mijail Ignatiev, que invirtió 15 segundos más.
"Sólo quería concentrarme en la general, pero cuando vi los tiempos intermedios, también quería la victoria de etapa y di el máximo hasta la meta", explicó el líder.
De nuevo el gran perdedor fue Armstrong, que en la que un día fue su mejor disciplina decepcionó con un puesto 16 y perdió otro minuto y medio respecto a su compañero y rival en Astana.
Cuando faltan tres jornadas para el final, Contador, que ganó hoy su segunda etapa tras la de final en Verbier, aventaja en la general al luxemburgués Andy Schleck por 4:11 minutos y a Armstrong por 5:25.
Incluso aunque el norteamericano recuperó hoy un lugar en el podio al superar a Franck Schleck, el día fue amargo para él. Tras su fracaso en la montaña, el texano tuvo que reconocer también ahora en la lucha contra el crono que no puede darle la vuelta al tiempo.
En una disciplina que un día fue su reino -el ciclista de 37 años ha ganado hasta ahora 11 cronos del Tour-, Armstrong ni siquiera pudo meterse hoy entre los 15 primeros.
Pero el texano no se rinde y promete más el año que viene. Al final de la etapa, se anunció que Radio Shack será nuevo sponsor del equipo que quiere montar Armstrong y su amigo Johan Bruyneel en 2010.
En 2009, sólo un desfallecimiento que nadie espera el sábado en el Mont Ventoux podría impedir que Contador gane su segundo Tour. El mismo Andy Schleck admitió la hegemonía del español: "Contador es el más fuerte, en eso no hay duda. Pero para el Mont Ventoux aún tenemos planes".
Contador cruzó la meta con los dientes apretados por el esfuerzo y sólo se permitió una sonrisa tras comprobar que, aunque sólo fuera por tres segundos, había logrado la victoria.
"Un triunfo en una contrarreloj del Tour es algo especial. Fue un gran día para mí", dijo el español de 26 años, que dio también una amarga lección a su rival en el Astana, Lance Armstrong.
Algo quedó claro al final: Contador, campeón en 2007, domina el Tour al estilo del derrotado texano en sus mejores tiempos: primero en las montañas y ahora por primera vez en la contrarreloj.
El español ganó con un tiempo de 40:30 minutos por delante del suizo Fabian Cancellara, actual campeón olímpico contra el crono. Tercero fue el ruso Mijail Ignatiev, que invirtió 15 segundos más.
"Sólo quería concentrarme en la general, pero cuando vi los tiempos intermedios, también quería la victoria de etapa y di el máximo hasta la meta", explicó el líder.
De nuevo el gran perdedor fue Armstrong, que en la que un día fue su mejor disciplina decepcionó con un puesto 16 y perdió otro minuto y medio respecto a su compañero y rival en Astana.
Cuando faltan tres jornadas para el final, Contador, que ganó hoy su segunda etapa tras la de final en Verbier, aventaja en la general al luxemburgués Andy Schleck por 4:11 minutos y a Armstrong por 5:25.
Incluso aunque el norteamericano recuperó hoy un lugar en el podio al superar a Franck Schleck, el día fue amargo para él. Tras su fracaso en la montaña, el texano tuvo que reconocer también ahora en la lucha contra el crono que no puede darle la vuelta al tiempo.
En una disciplina que un día fue su reino -el ciclista de 37 años ha ganado hasta ahora 11 cronos del Tour-, Armstrong ni siquiera pudo meterse hoy entre los 15 primeros.
Pero el texano no se rinde y promete más el año que viene. Al final de la etapa, se anunció que Radio Shack será nuevo sponsor del equipo que quiere montar Armstrong y su amigo Johan Bruyneel en 2010.
En 2009, sólo un desfallecimiento que nadie espera el sábado en el Mont Ventoux podría impedir que Contador gane su segundo Tour. El mismo Andy Schleck admitió la hegemonía del español: "Contador es el más fuerte, en eso no hay duda. Pero para el Mont Ventoux aún tenemos planes".
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